10 julio, 2010

Radius HP-TWF11R: cuando menos es más

Vuelvo a la carga tras unas semanas de sequía. Y esta vez con un auricular intracanal japonés, el Radius HP-TWF11R, también conocido como Radius W-Pro o, incluso, Radius DDM. Te va a gustar.

Entre sus características más reseñables destaca, precisamente, el sistema Dual Diaphragms Matrix (DDM) -de ahí el apelativo- que viene a ser algo así como un doble transductor dinámico.

No hablaré de lo divino más que de lo humano. Para los más curiosos o expertos dejo el hecho de profundizar sobre el tema de los transductores y sus implicaciones técnicas, y yo me conformo con lo que mi oído percibe y mi cerebro interpreta. Y es que la piel se me eriza con las sensaciones, no con elucubraciones matemáticas.

Pero para hacernos una idea humanamente entendible de lo que representa el Radius HP-TWF11R -de ahora en adelante lo llamaré W-Pro para simplificar- deberíamos mirar, aunque sea de reojo, al Sennheiser IE8 o el Monster Turbine Pro.

Todos ellos tienen en común esa arquitectura característica aunque el Radius venga con el añadido de un segundo diafragma, dotándole de un buen detalle y claridad en todo el rango de frecuencia, sin rastro de las molestas sibilancias en las notas agudas, y siempre aderezado por una escena sonora tan amplia como sorprendente.

Y aunque es una obviedad que no es perfecto, que quizás no sea el más indicado precisamente para la práctica deportiva ni el que mejor atenuación consiga -al menos usando los protectores que trae de serie- es un buen auricular y no me sorprendería demasiado que alguien lo prefiriera a alguno de los mencionados anteriormente.

El Radius está a la venta en ZocoCity al precio de 149,95 euros.

Empiezo aquí mi review pero no antes de agradecer a Musica Acoustics Japan por ofrecerme la oportunidad de probar este auricular.

Accesorios

Como ya viene siendo habitual en auriculares 'pro', no incluye una gran cantidad de accesorios:

  • Dos pares de protectores grandes de silicona
  • Dos pares más de tamaño mediano (uno viene con el auricular)
  • Dos pares de tamaño pequeño
  • Una funda protectora rígida con soporte extraíble para enrollar el auricular
  • Una pequeña gamuza de limpieza

No son muchos pero menos trae un Westone UM3x que cuesta el doble.


Echo de menos una mayor variedad de protectores. Aún así, si ya eres poseedor de un Sennheiser IE8 o Monster Turbine Pro Gold (MTPG) estás de suerte porque los tres cuentan con un apéndice del mismo diámetro con lo que podemos intercambiar los protectores sin problemas.


Probando los protectores incluidos en el pack del Sennheiser IE8, hay uno más rígido de silicona que encaja perfectamente en el W-Pro y aporta un plus en comodidad y sujeción que mejora al protector de serie. Y por qué no decirlo: estéticamente también queda mejor.


El inconveniente de usar esta esponjilla es que aporta una mayor, y seguramente innecesaria, carga de graves al W-Pro, y también algo menos de aislamiento. También podemos acoplarle las estupendas Comply. La cuestión es probar con varios hasta dar con el idóneo siempre teniendo en cuenta esa compatibilidad.

Me ha gustado especialmente el soporte extraíble de goma para enrollar el cable:


Sólo recuerdo un auricular en el que se hubiera optado por una solución parecida para guardar el auricular mientras no se usa: el Shure E3C. La solución presentada por Radius me parece más práctica que el soporte integrado del Shure aunque eso también implica cargar con unos gramos más de peso y una caja algo más voluminosa.  


Por lo demás, eso es todo en cuanto a los accesorios. Bueno, también se incluye una pequeña gamuza como la que se incluye en la caja de las gafas de sol así como unos folletos con las instrucciones de uso y garantía. Radius ha prescindido, por contra, del bastoncillo limpiador de cera que, para ser sinceros, poco uso le he dado en cualquiera de los otros auriculares con los que viene.

Diseño, confortabilidad y cableado

Reconozco que la primera sensación que tuve al desempaquetar el auricular es que la comodidad no podía ser su mejor cualidad, precisamente.

Acostumbrado a los ergonómicos Westone, cualquier otro diseño me chirría un poco planteándome serias dudas sobre su ajuste y confortabilidad. Me pasó con el voluminoso Sennheiser IE8, con el Turbine Pro y su carcasa metálica, y ahora también con el Radius W-Pro y su diseño digamos que clásico. Pero basta probarlo para salir de dudas.

El Radius W-Pro puede colocarse al estilo tradicional -como se ve en la siguiente imagen- o al estilo in-ear, por encima de la oreja. Personalmente prefiero la primera opción.


Y la verdad es que me resulta incluso más cómodo que los IE8, sobretodo porque la superfície que entra en contacto con la piel es menor. El IE8 queda encajado en el pabellón auditivo externo, obligándote a pasar el cable por encima de la oreja. El W-Pro, en cambio, descansa en la parte inferior de la zona interna de la oreja.

 

Si vas a utilizar el auricular mientras caminas o practicas alguna otra actividad deportiva, conviene que presiones la carcasa en su mitad inferior, y de fuera para dentro, para mejorar el ajuste e impedir que se salga.

 

Aunque su diseño tiende a lo clásico, recordándome ligeramente a los más que decentes auriculares de la gama EX que incluyen de serie los Sony, lo cierto es que resultan muy elegantes. Son muy planos, muy ligeros, sin aristas ni ángulos y de tacto muy suave. Los acabados me parecen buenos.


La combinación de colores es acertada, para mi gusto, aunque también he de decir que los ojos se me van hacia el modelo de color negro. Por cierto, el Radius W-Pro en negro comenzará a comercializarse a partir  de mediados de este mismo mes de julio así que no te extrañe si aún no lo ves en ningún sitio. Es cuestión de días. En granate sí que está en stock.


Sobre el cable, mi opinión es que tiene buen tacto, es lo suficientemente rígido como para dar sensación de consistencia e impedir los malditos nudos y, al mismo tiempo, es lo suficientemente  maleable como para no sentir tiranteces mientras usas el auricular. Eso sí, debido a la malla de nylon que lo recubre me recuerda un poco a los cordones de unos zapatos. Mide unos 125 centímetros, la misma longitud que el cable del Sennheiser IE8, y algo así como tres dedos menos que el Westone UM3x.

Es un cable simétrico, en 'Y', no reemplazable, que incluye un regulador para ajustarlo a la altura del cuello y justo a partir de ese regulador el cable traslada al altavoz los ruidos derivados del contacto con la ropa o piel. En mi opinión, esas ligeras microfonías no alcanzan el nivel de problema y se limitan a ligeros ruidos mientras el reproductor permanece en silencio pasando prácticamente desapercibido en plena reproducción musical.

Credenciales sonoras: buen equilibrio frecuencial y gran espacialidad

Después del reciente desastre del S9, he emparejado al Radius W-Pro con el Sony NWZ-A829 y sus emepetreses a máxima calidad en bitrate constante. Siempre en ecualización plana y configurado con los parámetros de audio desactivados aunque en algún momento le puede sentar bien subir un puntito los agudos.


En cuanto a la discografía, he utilizado de todo un poco. Concretando un poco más, éstos son algunos de los temas que me han servido de referencia mientras escribía esta entrada:

  • "Stars all semm to weep", del disco Central Reservation de Beth Orton
  • "California stars", del disco Mermaid Avenue de Billy Bragg & Wilco
  • "New York", del disco Jukebox de Cat Power
  • "Modern love", del Let's dance de David Bowie
  • "Por la boca vive el pez", del disco homónimo de Fito & Fitipaldis
  • "Stella was a diver and she was always down", del disco Turn on the bright lights de Interpol
  • "Cello concerto in B minor", del disco Cello concertos de Han-na Chang
  • "Go on", del Sleep through the static de Jack Johnson
  • "Unwind", del Julian Plenti is... skyscraper de Julian Plenti (Paul Banks, de Interpol)
  • "Boggie down", del disco Time to pretend de MGMT
  • "Escape", del Poison de Jay-Jay Johanson
  • "Englishman in New York", del Nothing like the sun de Sting
  • "Woman in chains", del Tears roll down de los Tears for Fears
  • "Fightin' away the tears", del Navy brown blues de Mocky
  • "Cigarettes", del I love your glasses de Russian Red
  • "When Mac was swimming", del Befriended de The Innocence Mission
  • "When she's dancing", del Questions de US3
  • "Ruby, don't take your love to town", del disco 55578 de Wolfsheim
  • "The best is yet to come", del recopilatorio My way de Frank Sinatra
Esta lista sólo es una referencia para hacerme una idea de lo que es el Radius W-Pro. No voy a hacer un análisis exhaustivo, canción a canción, estilo por estilo, y me limitaré a sacar unas conclusiones generales, como siempre subjetivas y discutibles, pero que puedan permitirte ubicar este auricular entre la extensa lista de intracanales que conocemos.


El Sennheiser IE8 y el Monster Turbine Pro Gold son los pares con los que lo he enfrentado por su similitud técnica (driver dinámico). El W-Pro lo he utilizado con el protector que viene de serie; el Sennheiser con el doble banda; el MTPG con el protector Comply gris. Ten presente que cada protector da una respuesta ligeramente diferente. De todos ellos prefiero las Comply.

Después de dejarlo varias horas sonando al viento, aunque no he llevado el control exacto, las cuatro o cinco ideas generales que saco del Radius W-Pro son:

  • Buena respuesta de graves
  • Medios líquidos
  • Agudos sutiles, bien controlados
  • Representación espacial muy extensa
  • Buena separación de instrumentos

Reconozco que me ha sorprendido muy gratamente. Es un auricular que se defiende bastante bien con todos los géneros musicales aunque siempre que asoma la variante electrónica parece que el Radius se crece y saca lo mejor de si mismo. También con temas acústicos, de pocos instrumentos y bien definidos, el W-Pro se desenvuelve con mucha soltura. En temas rockeros, sin embargo, ya no me gusta tanto: guitarras con poca 'chicha', un bajo algo denso y un escenario demasiado abierto para este estilo le hacen perder fuerza a la composición.
Su perfil sonoro me recuerda al Monster Turbine Pro Gold, en esencia, pero también al Sennheiser IE8 en algunos matices, como el grave.


En ninguno de ellos destacaría una gran potencia en agudos; tampoco unos medios excepcionales ni, para ser menos, una respuesta en bajas frecuencias perfecta. Pero sumado todo, la estructura musical resultante es muy coherente, sin un grave que ande pasado o unos agudos que puedan jugar peligrosamente en la frontera que separa la definición de la sibilancia o un medio artificialmente inflado. Nada de eso.

He pasado algunas horas con el W-Pro y la fatiga auditiva ha sido baja. Y ésto puede pasar por dos motivos: porque me esté quedando sordo o porque el Radius ha conseguido mantener bajo estricto control todo el rango frecuencial. Juraría que es lo segundo, pensamiento reforzado por la idea de que el W-Pro no destaca en nada especialmente sino más bien por la respuesta del todo en su conjunto.

Bueno, puntualizaré: el Radius W-Pro consigue una presentación espacial realmente atípica para un intracanal. Haciendo memoria, sólo recuerdo al MTPG como el único que se aproxima a esta idea.

Radius W-Pro vs Sennheiser IE8

Estos dos auriculares tienen mucho en común pero no tanto como lo tiene con el MTPG.


Para ser sinceros, en algunas escuchas he tenido serias dificultades  para distinguirlos. Pero, aún así, ya verás que hay algunos matices que los alejan.

El Sennheiser IE hace una presentación musical más intimista, más cercana. Es un sonido dulce, bien definido y con mayor presencia y contundencia en las frecuencias bajas que en el W-Pro.

El sonido del Radius W-Pro es más plano, sin nada que destaque notoriamente sobre el resto. Así como en el IE8 puedo apreciar claramente el golpe del grave, en el W-Pro queda más integrado en la composición, algo diluido en algunos momentos pero claramente visible en otros.

El W-Pro tiene un gran comportamiento en el rango medio, especialmente en las voces ya sean masculinas o femeninas, porque suenan muy naturales. Curiosamente el IE8, que nunca me ha parecido un auricular sibilante, ahora sí lo parece enfrentado al W-Pro. Escuchando a Wilco, las voces suenan realmente bellas con el W-Pro mientras que silban ligeramente con el IE8. Cuando aparecen las guitarras, ni con el Radius ni con el IE8 creo que alcanzaríamos el nirvana pero se defienden bien (para rockear creo que sigue siendo mejor opción el Grado GR8). Puedo renunciar un poco -sólo un poco- al gañitar de la guitarra cuando los dedos acarician las cuerdas a cambio de un punto de frescura y naturalidad en las voces, como pasa con el W-Pro, compensando a su vez el carácter más dulcificado en los armónicos.

La puesta en escena del Radius es sorprendente. Pocos intracanales consiguen una amplitud tan grande, una presentación musical realmente tan extensa como consigue éste.

En algunas composiciones, sobretodo las rockeras que son más de cuerpo a cuerpo, esa espacialidad no le sienta del todo bien. Es del todo probable que la fuerza del grave del IE8 y su impacto directo sea más disfrutable a la hora de rockear que con el W-Pro.

Por contra, ese amplio escenario le va bien al Radius con el jazz. Aquí el grave más tranquilo del W-Pro podría darle un poco de ventaja respecto al IE8, ya que la respuesta de graves en éste se vuelve más pesada.

El Sennheiser IE8 destaca por una respuesta más contundente y cercana; el Radius W-Pro, por ser más templado y abierto. También creo que el IE8 es ligeramente más preciso y definido pero el W-Pro consigue una lograda y amplia representación espacial y ofrece una respuesta líquida, viva, en las voces de los solistas, por un poco más de densidad y dulzura del IE8.

Llegados a este punto deberíamos valorar otras otras cualidades del producto para decantarnos porque la cosa está complicada para decidirse. No son dos gotas de agua.

Radius W-Pro vs Monster Turbine Pro Gold

Respecto al MTPG parece que los parecidos son más que razonables, musicalmente hablando.


Separar el polvo de la paja no es tarea fácil en este caso. Las diferencias son menos evidentes aunque en una primera escucha ya es posible identificar una mayor densidad de graves en el Radius W-Pro.

También observo que la respuesta frecuencial es ligeramente más plana que en el W-Pro. El MTPG suena más metálico, eléctrico, por el sonido más dulzón del Radius.

Seguramente para monitorizaje el MTPG aporte una información más fiable, por su neutralidad, pero también eso contribuye a mantenerte a cierta distancia de las emociones. Un poco de calor siempre viene bien y el W-Pro lo proporciona haciendo la escucha más confortable. Me pasa escuchando a Sade o Sting donde destaca su voz aterciopelada y un grave corpulento.

Para temas electrónicos me inclino por la pegada del W-Pro aunque un poco más de potencia en los agudos no le vendría nada mal, aportándole más 'chicha', un plus más visceral al conjunto.

Igualmente, al mismo nivel de volumen, el W-Pro suena más fuerte.

Conclusión

Seré claro y conciso: el Radius W-Pro no cuesta lo que vale. Dicho de otra manera: el W-Pro vale mucho más que el precio que tiene. De verdad.


Es un auricular para largas escuchas pero poco movimiento: en el trabajo, en casa, en el parque de al lado de casa o sobre la toalla en una tranquila tarde de playa. Cualquier lugar es bueno para disfrutarlo siempre que no haya actividad física intensa por medio. Porque suena muy bien, es muy cómodo pero no es un auricular que permita un sellado y ajuste tan bueno como un Westone, claro que tampoco son muchos más los que lo consiguen. Con lo que mejor disfrutarlo desde la calma y reposo.

Entre los auriculares 'dinámicos', el Radius W-Pro lo situaría a medio camino del Monster Turbine Pro Gold y el Sennheiser IE8, aunque más cercano al primero que al segundo.

Del MTPG coge toda su esencia: su perfil sonoro, su discreción, la templanza en la recreación musical y la amplia puesta en escena, aunque llevada un paso más allá. Mientras que del Sennheiser intenta asociar, aunque más discretamente, el golpe del grave, muy presente en el IE8.

Quizás sea más bien como un MTPG pero con el grave más presencial y el conjunto musical mejor compactado  y más realista (en el MTPG en muchos momentos tengo la sensación de lejanía, como si no hubiera encajado bien el auricular en el canal auditivo).

No puedo decidir por ti ni lo pretendo. Pero el Radius W-Pro es simplemente un regalo para tu bolsillo como también lo es para los oídos. Te aseguro que algunos auriculares mucho más caros no tienen un comportamiento mucho mejor que éste. Y es que el Radius W-Pro, HP-TWF11R o DDM, como prefieras llamarlo, es un auricular que cuestiona la vieja creencia de que sólo lo más caro es lo mejor: el Radius, con un precio de rango medio ofrece un rendimiento más propio de un rango superior. Menos es más, ya sabes.

Por último, si finalmente te decides por el W-Pro, también pensaría en acoplarle unas T-400 o TX-400 de Comply. Yo lo he probado con las del MTPG y el resultado es muy bueno en comodidad, sellado y frescura en el sonido.

Y ya para acabar, no quiero cerrar esta entrada sin dar las gracias, nuevamente, a Musica Acoustics Japan por darme la posibilidad de probar este estupendo auricular.  

[Actualización, 22/09/2010]

11 comentarios:

Anónimo dijo...

hola,

1ero que nada felicitaciones por tu blog, muy bueno la verdad !!

ahora tu que has probado los
hifiman RE0 , que opinais de estos??

o los radius estan en otras ligas?
a los hifiman los veo faltos de bajos
:S

y me gustaria probar otros iems


saludos!!

Blogoblo dijo...

Yo prefiero el Radius. Me gusta su calidez general y su respuesta en graves, que aparece sin demasiados esfuerzos. Es muy disfrutable.

El RE0 es más problemático porque hay que ajustar muy bien el auricular en la cavidad para sacar esos graves aunque suena muy líquido y al precio al que están lo hace muy atractivo.

Un saludo.

Anónimo dijo...

tengo los Re0 en casa, claro el precio no es comparable con los radius, pero ...

los has probado con otras foams?
con algun ampli ? He pedido un Fiio e5, y queria probar con otras foams, que me recomiendas? algunas de shure tienen buena fama

http://cgi.ebay.es/10-MEDIUM-Foam-Sleeves-Ear-tip-SHURE-EABKF1-10M-PA910M_W0QQitemZ200366886480QQcmdZViewItemQQptZLH_DefaultDomain_0?hash=item2ea6cc0e50#shId

saludos !!

Blogoblo dijo...

Sorry, sólo lo he probado con los protectores que trae de serie.

Asegúrate, eso sí, que el 'brazo' del auricular entra en el agujero del protector porque las 'olivas negras' son más estrechas y no entran el RE0.

Anónimo dijo...

Te sugiero que edites tus comentarios sobre el UM3X, ya que el nuevo modelo no solo trae cables inercambiables, como el IE8 o el nuvo SE535, sono que ademas trae muchos mas accesorios que antes: UM3X Monitor with Removable Cable, Features: Padded travel case, ten different eartips, wax loop for
cleaning, 1/8 in. to 1/4 in. plug adapter and inline volume control. http://www.westone.com/catalog/um3x-monitor-removable-cable

Anónimo dijo...

hola,


estos radius tienen mas bajos que los hifiman RE0, estoy planteandome hacer este upgrade, a falta de bajos de los RE0


saludos

Blogoblo dijo...

Sí, y muy buenos por cierto.

Anónimo dijo...

hola,


por 150 dolares o menos.. , que auriculares eligirias, me gusta el perfil sonoro de los RE0 pero quiero mas bajos.
saludos

candidatos:

superfi 5
brainwavz m3 (por salir)
radius w pro

a utilizar con un cowon d2 SIN amplificacion.
saludos!! gracias de antemano!

Blogoblo dijo...

No he probado el M3 pero entre el Super.Fi 5 y el Radius yo me quedo con el Radius.

Anónimo dijo...

Y de los westone?
como van en bajos ?
UM1 o Westone 1 ?


que me recomendais por 150 dolares americanos?

saludos y gracias!

Blogoblo dijo...

No he tenido la oportunidad de probar ni el UM1 ni el más reciente W1 pero Westone siempre ofrece buenas prestaciones en un precio razonable.